TERCER CONCIERTO DE ÓRGANO

JOHANN SEBASTIAN BACH (1685-1750): TRANSCRIPCIONES

PROGRAMA

A. Transcripciones para órgano de Johann Sebastian Bach de obras de otros compositores

Aria en Fa mayor de Francois Couperin (1668-1733) BWV 587

Concierto en Re menor de Alessandro Marcello (1673-1747) BWV 974 (–, Adagio, Presto)

Trío en Sol mayor de Georg Philipp Telemann (1681-1767) BWV 586

 

B. Transcripciones para órgano de Johann Sebastian Bach de sus propias obras

Coral Wachet auf, ruft uns die Stimme BWV 645

Coral Wo soll ich fliehen hin oder: Auf meinen lieben Gott BWV 646

Coral Wer nur den lieben Gott lässt walten BWV 647

Coral Meine Seele erhebet den Herren BWV 648

Coral Ach blieb‘ bei uns, Herr Jesu Christ BWV 649

Coral Kommst du nun, Herr Jesu Christ, von Himmel herunter BWV 650

 

C. Obras de Johann Sebastian Bach transcritas para órgano por otros autores

Toccata con Fuga Pedaliter ex D# BWB 565 (Atribuida)

Jesus bleibet, meine Freude, coral de la cantata BWV 147

Adagio en Mi bemol mayor BWV 1017, 3 (transcripción por Franz Liszt)

Aria Schafe können sicher wieder BWV 208, 9

Air de la Ouverture (Suite) en Re mayor BWV 1068

Sinfonia  (Arioso) de la Cantata BWV 156 « Ich steh mit einem Fuss im Grabe »

Ciaconna en Re menor BWV 1004, 5

CUARTO CONCIERTO DE ÓRGANO

JOHANN SEBASTIAN BACH (1685-1750): TRANSCRIPCIONES II

PROGRAMA

Transcripciones para órgano de Johann Sebastian Bach de conciertos de otros compositores

Concierto en Do mayor BWV 595 del Príncipe Johann Ernst von Sachsen-Weimar

(Allegro)

Concierto en La menor BWV 593 de Antonio Vivaldi

(Allegro) – Adagio - Allegro

Concierto en Re menor BWV 596 de Antonio Vivaldi

(Allegro moderato) – Grave, Fuga – Largo - Allegro

Concierto en Sol mayor BWV 592 del Príncipe Johann Ernst von Sachsen-Weimar

(Allegro) – Grave - Presto

Concierto en Do mayor (Gran Mogol) BWV 594 de Antonio Vivaldi

(Allegro) - Recitativo (Adagio) - Allegro

 

 

 

                                     

ÓRGANO: Ph. D. LUIS GONZÁLEZ CATALÁN

Domingo 21 de Junio de 2015 a las 18,00 horas, Iglesia Luterana El Redentor.

 Calle Lota 2330, Metro Los Leones (entre Suecia y Los Leones)

Entrada Liberada

Notas al programa.

La conocida intérprete e investigadora Kimberley Marshall afirma en su edición de Música Renacentista para Órgano que: “Las piezas que aquí figuran proveen al organista y al intérprete de instrumentos de teclado de cuerdas (clavecín y clavicordio) un ejemplo amplio de estilos de escritura renacentista para estos instrumentos. Este repertorio incluye principalmente los mismos tipos de música que aparecen en fuentes medievales tardías: Arreglos de Danzas y Canciones (mi énfasis), elaboraciones sobre un Cantus Firmus, y música litúrgica” En efecto, las primeras piezas para órgano fueron transcripciones y/o arreglos de música proveniente de otras fuentes. Posteriormente los organistas empezaron a desarrollar un lenguaje musical propio, originándose así los conocidos Preludios, tocatas, fantasías, canzonas, ricercares, fugas y preludios corales en los más variados estilos. La transcripción para órgano siguió evolucionando en manos de grandes maestros, y existe un amplio repertorio de transcripciones para teclado de obras orquestales y vocales de todos los tiempos. Juan Sebastián Bach proveyó al órgano de cinco transcripciones de conciertos y de otros diecisiete conciertos

ÓRGANO: Ph. D. LUIS GONZÁLEZ CATALÁN

Domingo 24 de Mayo de 2015 a las 18,00 horas, Iglesia Luterana El Redentor.

 Calle Lota 2330, Metro Los Leones (entre Suecia y Los Leones)

Entrada Liberada

Notas al programa.

La conocida intérprete e investigadora Kimberley Marshall afirma en su edición de Música Renacentista para Órgano que: “Las piezas que aquí figuran proveen al organista y al intérprete de instrumentos de teclado de cuerdas (clavecín y clavicordio) un ejemplo amplio de estilos de escritura renacentista para estos instrumentos. Este repertorio incluye principalmente los mismos tipos de música que aparecen en fuentes medievales tardías: Arreglos de Danzas y Canciones (mi énfasis), elaboraciones sobre un Cantus Firmus, y música litúrgica” En efecto, las primeras piezas para órgano fueron transcripciones y/o arreglos de música proveniente de otras fuentes. Posteriormente los organistas empezaron a desarrollar un lenguaje musical propio, originándose así los conocidos Preludios, tocatas, fantasías, canzonas, ricercares, fugas y preludios corales en los más variados estilos. La transcripción para órgano siguió evolucionando en manos de grandes maestros, y existe un amplio repertorio de transcripciones para teclado de obras orquestales y vocales de todos los tiempos. Juan Sebastián Bach proveyó al órgano de cinco transcripciones de conciertos y de otros diecisiete conciertos para el clavecín. De estos últimos emana el Concierto en Re menor de Alessandro Marcello que escucharán esta tarde.      

La primera parte de este programa les permitirá conocer el Aria en Fa mayor, que es en realidad un Rondó, proviene de una colección de obras de música de cámara llamada Les Nations, Ordre IV “L’Impériale, sección 4, del compositor francés Francois Couperin (1668-1733). Resulta asombroso el ámbito exigido al teclado de pedales, que se mueve hasta la nota Mi de la tercera octava de la pedalera, casos que encontramos solamente en la Tocata BWV 540, en la Fuga BWV 536 y en el coral BWV 608. La estructura de esta composición es A-B-A, es decir, que la primera sección, de 32 compases, es repetida como conclusión. La sección central es un poco más amplia, con 42 compases. El Concerto en Re menor de Alessandro Marcello fue escrito para Oboe solista con acompañamiento de Cuerdas y Continuo. Existe una versión para órgano de Weinberger, que no poseo. Por alguna razón Bach destinó su transcripción al clavecín, pero varios organistas gustamos tocarlo en el órgano, en que el movimiento central sale altamente favorecido en sus notas largas. En 1714 Georg Philipp Teleman fue padrino de bautismo de Carl Philipp Emmanuel Bach. El Trío en Sol mayor atribuido a Bach ha sido identificado por Max Seiffert como una obra de Telemann; fue publicado por primera vez en 1904. La obra está estructurada en dos secciones que se repiten, y tiene características contrapuntísticas de fuga.

La sección final de este concierto les permitirá disfrutar de varias composiciones de Bach destinadas a otros medios sonoros. La famosísima Tocata y Fuga en Re menor, cuya autenticidad ha sido ampliamente cuestionada por Friedrich Blume en 1965, Walter Emery en 1966, y por Roger Bullivant en 1971. El musicólogo Peter Williams argumentó en contra de la paternidad bachiana de la obra en su brillante artículo de 1981 y sugirió convincentemente que podría tratarse en realidad de una obra original para violín no acompañado, la que habría sido posteriormente transcrita para órgano. A partir de la versión de órgano realizó una versión para violín, que fue transcrita por Jaap Schröder y publicada por Faber Music Limited de Londres en 1985. Lo que aún no ha sido demostrado en que haya sido Bach quien compuso la versión de violín solo. El popular coral Jesús, alegría de los hombres es presentado en las secciones seis y doce la Cantata BWV 147, destinada a la Visitación de la Virgen María. El Adagio transcrito por Franz Liszt fue originalmente compuesto por Bach como tercer movimiento de la cuarta Sonata para Violín y Clavecín en Do menor. El Aria para Soprano, dos Flautas Dulces y Continuo de la Cantata de la Caza goza de popularidad entre los organistas, y existen de ella varias transcripciones para órgano. El Air, de gran popularidad entre los melómanos (llamado “Aria de la cuerda de Sol” por la adaptación musical del violinista AugustWilhelm) es el segundo movimiento de la segunda Suite, u Overtura, en Re mayor. El movimiento conocido como Arioso, popularizado por el famoso organista Virgil Fox bajo este nombre - en una hiper-romantizada versión - es en realidad la Sinfonia inicial, Adagio, de la Cantata BWV 156. Dicha música fue empleada también por Bach en el segundo movimiento, Largo, del Concierto en Fa menor BWV 1056 para clavecín y orquesta, cuyo original habría sido compuesto para violín. En cuanto a la justamente célebre Chaconne en Re menor, es el movimiento final de la Partita en Re menor BWV 1004 para violín solo. Johannes Brahms realizó una versión para la mano izquierda del pianista (Studien für Pianoforte Nr. 5), y existen algunas versiones para órgano de Best, Börner y Overholzer. No habiendo tenido acceso a dichas ediciones, creé una propia para el Dr. Roy Wilson con ocasión de mi concierto doctoral destinado a transcripciones para órgano

Me permito a continuación citar extractos de mi artículo “Intencionalidad en el uso del número 14 en la obra de Bach” publicado por la revista Neuma, de la Universidad de Talca: Los Seis Corales “Schübler, colección que Bach hizo imprimir en 1746 bajo el título de “Sechs Choräle von verschiedener Art” para un órgano de dos teclados y pedal, es conocida bajo el nombre de Corales Schübler, por el nombre de su editor Johann Georg Schübler de Nüremberg. Hasta la publicación de los artículos de Randolph Currie para la revista BACH del Insituto Bach Riemenschneider Bach (Currie, Randolph - 1973). Cyclic Unity in Bach’s Sechs Choraele: A new Look at the Schüblers.” Bach, Quarterly Journal of the Riemenschneider-Bach Institute, Vol. IV, 1973 y Vol. 2, p 25. He encontrado otras referencias del mismo autor de los números 14 y 41),  nada nuevo había sido dicho acerca de estas composiciones, que podrían ser precisamente las últimas publicadas por Bach. Aparte del hecho de que Currie encuentra diseñado un claro plan teológico en la obra, que asocia la primera venida de Cristo (la llegada del Esposo a que hace referencia el coral) con su venida final (escatológica), es el aspecto numérico de la misma descubierto por Currie el que voy a señalar (que tiene relación con el hecho de que la palabra Bach suma 14 al ser la letra B la segunda, la letra A la primera, la C la tercera y la H la octava, lo cual suma catorce): Por de pronto, el número total de páginas es 77 (que suma catorce), y la página de título contiene 65 palabras, que indicarían la edad que Bach tenía entre el 21 de marzo al 28 de julio, 65 años. Es oportuno señalar aquí que cuando Bach nació, la Alemania protestante seguía el Calendario Juliano, y que el que nos rige actualmente, llamado Calendario Gregoriano, fue adoptado por ellos en 1700. Consecuentemente, Bach vivió diez días menos de los que creemos. Los que aún celebramos su “cumpleaños” el día 21 de Marzo, en realidad deberíamos celebrarlo el 31 de Marzo! En los Seis Corales encontramos el más substancial número de evidencias relativas al número 14. 1) El título de la colección es Sechs Choraele von verschiedener Art auf einer Orgel mit 2 Clavieren und Pedal vorzuspielen, que contiene 14 palabras. 2) Hay catorce páginas de música ‘numeradas’. 3) Hay 41 líneas de pentagrama (la música está impresa en tres, en vez de los habituales dos pentagramas. 4) El número total de palabras de los títulos de los corales, incluido el título alternativo para el Segundo, tiene un total de 41 palabras (J S BACH). Por último, un dato anecdótico: El número total de compases de la colección es de 256. En el compás 128, justo al centro de la colección, aparece, por única vez, el motivo BACH (las notas Si bemol, La, Do y Si natural) en el coral basado en el Magnificat (Meine Seele erhebt den Herren). Este coral está compuesto en tres secciones con la siguiente disposición de compases: 14 + 7 + 14, que suma 35. Al comienzo del primer coral (Wachet auf) aparecen dos grupos de notas separados por los únicos silencios de la línea melódica de pedal, con un total de 14 notas. Al sumarlas a las 34 notas que toca la mano derecha el total de notas aumenta a 48 (2 x 1 x 3 x 8). Hay aún más simbolismo numérico en el coral Wachet auf: Hay cuatro compases que tienen exactamente 14 notas (compases 12, 19, 22, y 48). Al final del coral Wer nur den lieben Gott laesst walten aparecen siete dobles líneas de compases, que como señala Currie, aunque podrían venir del editor más que del propio Bach. Muchos investigadores han argumentado que el segundo coral de la colección, de 33 compases, con su doble título Wo soll ich fliehen ihn od. Auf meinen lieben Gott, pertenecería a una cantata perdida. Prefiero compartir la opinión de Hermann Keller de que este coral fue especialmente compuesto para el ciclo. Es imposible no hacer la conexión con el coral del mismo nombre BWV 694, que es considerablemente más largo (91 compases contra 33) que también está escrito en forma de trío para órgano, y concluir que Bach lo habría modificado con un propósito en mente: Bach lo acortó (y cambió de tono) para así  poder tener el número exacto de compases en qué encajar el motivo BACH que se encuentra justo al medio de la colección de Seis Corales. Es admirable constatar cómo Bach comparte su ciencia con nosotros y nos sigue enseñando a lo largo de los siglos.

 

Luis González Catalán, Organista-Organero

Licenciado en Artes Musicales Texas Tech University,

Magíster en Artes Musicales, Texas Tech University

Doctor en Filosolía de Bellas Artes, Texas Tech University

 

 

Culiprán, Melipilla, 21 de Mayo de 2014.