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Carl Weigle fue el creador de la famosa manufactura de órganos, primero ubicada en Stuttgart y después en Leinfelden‑Echterdingen (D). Originario de Ludwigsburg, aprendió la fabricación órganos junto al Maestro indiscutible de la época en Alemania : Eberhard Friedrich WALCKER, cuya primera esposa era una tía de Weigle. Despues de haber contribuido a algunos de los principales trabajos de Walcker, Weigle se estableció por su cuenta en 1845. En primer lugar, Weigle construyó órganos de transmisión mecánica, con los famosos Clavijeros de conos1 (Tubería) de los cuales había seguido muy de cerca la puesta a punto. Su órgano de Freudenstadt data de 1849. Pero a partir de 1870, construyó un órgano de transmisión exclusivament eléctrica convirtiendóle en pionero de este tipo de transmisión. En 1873, presentó uno de sus instrumentos en la Exposición de Viena. Su gran órgano con 3‑teclados (48 Registros) de Stuttgart (D) (Iglesia evangélica de Saint Jean) fue construido en 1876. Muy vanguardista desde el punto de vista de los progresos técnicos, fue un inventor y un experimentador fecundo, no sólo de sistemas de transmisión sino también de métodos de armonización y de nuevos registros. Muy aficionado de los Registros de Doble Bocas, se le atribuye en particular la creación de los Jubalfloete; es decir, de los Registros de dos bocas adyacentes, muy sonoros incluso a baja presión. La casa Weigle construyó también Oboes con Boca y los famosos Registros de Alta presión con nombres tan evocadores como: Grosgebeckt, Solo Gamba, Stentorphon, Tuba mirabilis... Carl Weigle transmitió su empresa a su hijo Friedrich en 1880, cuando casi había llegado a su centésimo Opus. Friedrich fue muy fiel a las tradiciones de su padre. La placa de dirección del órgano de la iglesia protestante de Bischwihr sigue redactada así : "CARL G. WEIGLE ORGELBAUMEISTER (STUTTGART) OPUS 237, 1900". 1 La mayor parte del tiempo, los órganos de la primera mitad del siglo XX recibieron una transmisión "neumática". La tecla del teclado es un tipo de válvula que permite enviar aire bajo presión a través de una cañería delgada. Ésta se abre camino desde el teclado hasta el somier, donde se infla un pequeño fuelle que activa la válvula que alimenta al tubo sonoro con aire. Es evidente lo que motivó el empleo de este tipo de transmisión: desde este momento, se podía poner el teclado en cualquier ubicación, o sea construir teclados "independientes". El teclado independiente hizo furor a principios de siglo. En efecto, este avance permitía al organista mirar a la nave o permitir que el coro se ubique delante del órgano, manteniendo la consola alejada. |
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